Seguidores

miércoles, 5 de octubre de 2011

Vuela, bicho.


Dime que es verdad, que te quedas a bailar,
porque no queda noche para más, que un último baile.
Somos dos, ¿para qué queremos más?
Yo solo busco que me tiemblen las piernas
Con solamente oír tu voz

1 comentario:

Juan Pardo dijo...

Tierno escrito en el que el amor aparece como plenitud que nos traspasa del pronombre personal Tú.Saludos poéticos.